Las elecciones municipales del 2011 en El Masnou (y 8)

El escenario electoral (y 5)

Quinta entrega del análisis de los partidos que pueden presentarse a las próximas elecciones municipales. A fecha de hoy ya se han publicado las diferentes candidaturas y si no hay impugnaciones o decisiones judiciales, los siete partidos que ya comente anteriormente estarán representados.

ICV-EUIA-E (Iniciativa per Catalunya i Verds – Esquerra Unida i Alternativa – Entesa): 2 – 4 regidores

Nuevamente será Màxim Fàbregas Añaños el candidato de esta formación, y será la cuarta convocatoria consecutiva.

Curiosamente, mientras no había posibilidades de gobernar esta fuerza alternaba el candidato en cada campaña pero desde que se intuyó la posibilidad de acceder al gobierno se perdió tan sana costumbre.

Raro. Legítimo, pero raro.

Esta formación llega a las elecciones con el aval de haber formado parte de los gobiernos de Eduard Gisbert lo que siempre será recordado en positivo. Suma esta formación todos los logros del gobierno y es legítima corresponsable de todos sus éxitos. Y han sido muchos.

Si bien las correcciones en el reparto de responsabilidades que supuso el pacto del 2007 limitaron sus competencias debido sobre todo, a su estancamiento como fuerza y al evidente incremento de los socialistas, así como a la pérdida de confianza en la ejecución de algunas responsabilidades, lo que redujeron su capacidad de acción, también es cierto que el hecho que ERC renunciase a entrar en el gobierno ha beneficiado a esta formación que aparece como copartícipe de la buena gestión del Gobierno.

Evidentemente, el éxito del pacto cabe repartirse entre los responsables de ambas formaciones: un 25% a Eduard Gisbert por su capacidad de trabajo y liderazgo y un 25% a  cada uno de los responsables de las tres áreas diferentes Marta Neira, Artur Gual y Màxim.

Cabe destacar el pragmatismo que ha impregnado hasta el momento el candidato de esta formación, renunciando a los postulados más dogmáticos de la misma para garantizar el acuerdo y la gobernabilidad y aceptando las instrucciones y el mandato del Alcalde.

Cierto es que han existido discrepancias políticas pero puedo aseverar que el cumplimiento de los acuerdos y, lo que es más importante, la aceptación del rol de cada uno ha permitido lo que parecía imposible: gobernar durante cuatro años en minoría.

En todo caso, cabe decir que no es tan fiero el león como lo pintan y la cordialidad ha primado entre ambas formaciones.

El abanico de resultados de esta formación puede oscilar desde una pérdida de votos por la acción del gobierno local y autonómico del que han formado parte, así como por el evidente desgaste de su candidato, capaz de lo mejor y lo peor; como un incremento como castigo a los gobiernos estatal y autonómico actuales.

En todo caso, sus discrepancias internas y sus conflictos ideológicos y dogmáticos hacen que, como formación, planteen una cosa y la contraria, según convenga.

Ahora, sin apriorismos, comienza una nueva etapa.